Las problemáticas vinculadas al ejercicio de la libertad de expresión y el acceso a los medios de comunicación adquirieron una centralidad inédita en el debate político desde la vuelta a la democracia. Si en un principio la lucha se orientó a desterrar la censura estatal, poco a poco la agenda de temas reclamó otro tipo de declaraciones y derechos ante la presencia de actores igualmente poderosos, capaces de poner en riesgo la diversidad y el pluralismo, condiciones para una verdadera democracia. Con la premisa de que el derecho de una sociedad a la información es un derecho humano universal, Damián Loreti y Luis Lozano sientan las bases para analizar y discutir el papel del Estado, los medios y los ciudadanos en el debate público. Los autores revisan las distintas escuelas y enfoques acerca de la libertad de expresión, se preguntan si el rol del Estado es sólo abstenerse de censurar o si le corresponde además garantizar condiciones de equidad en la comunicación social, exponen los vaivenes de la censura desde una perspectiva histórica que les permite reconocer tanto la censura estatal como la empresarial, destacan los avances en la despenalización de las voces críticas que afectan a funcionarios públicos, y exploran los dilemas de la concentración de la propiedad de los medios y la necesidad de concebir leyes antimonopólicas. Además, retoman cruciales asignaturas pendientes, como una ley de acceso a la información pública que comprometa a los tres poderes del Estado y el diseño de un mecanismo que transparente las complejas relaciones económicas entre gobiernos y medios, e indagan en torno a los desafíos que plantea la pluralidad de contenidos en el mundo digital. En un contexto de visibilización de disputas coyunturales, El derecho a comunicar condensa y sistematiza las principales discusiones y doctrinas sobre el derecho a la libertad de expresión, y aporta un marco esclarecedor, reflexivo y actualizado de acuerdo con la normativa y la jurisprudencia internacional, para debatir la universalización de un derecho humano que está en el centro del debate entre los medios, el Estado y la sociedad. ?Se trata de que la diversidad consagrada en los textos legales cobre vida en la realidad, garantizada por un Estado que facilite el acceso sin someterse a la lógica del mercado pero que no pretenda regular los contenidos. Sólo así los medios podrán ser los espejos y ventanas que proponen los autores de este libro. Con sus propias palabras: ?Ventanas para ver el mundo y que el mundo nos vea, y espejos para vernos reflejados?. Este libro es una guía imprescindible que ayudará a escoger los mejores caminos para lograrlo.? (Horacio Verbitsky)