Felipe Solá es peronista e ingeniero agrónomo: desde esa doble condición de hombre de la pampa húmeda y hombre de Estado ha sido testigo y protagonista de la historia argentina reciente. A partir de esa enorme experiencia "hecha de observación y participación, de ilusiones y frustraciones, de pérdidas y éxitos" escribió este libro, la memoria política más importante de la posdictadura. En Peronismo, pampa y peligro Solá narra de manera honesta y descarnada cómo se gobiernan el país difícil y la enigmática provincia de Buenos Aires. En su pintura se vislumbran pinceladas de disparate y fragilidad propias de las personas, que también se dan en el poder. A lo largo de ese derrotero el peronismo asumía diferentes rostros y Solá buscaba un lugar en el escenario nacional. Esa exploración sorprende en estas páginas, que a la vez trazan las caracterizaciones más agudas del gran panteón de la política: de Alfonsín a Menem, de Cafiero a Duhalde, del papa Francisco a Néstor Kirchner, de Cristina Fernández a Macri. Cuando la Argentina vuelve a asomarse a una crisis de dimensiones desconocidas, Solá recorre las lecciones de 35 años de democracia desde la escala exuberante de quien la miró de cerca. Así el amor y las rupturas amorosas se mezclan con la lucha por disciplinar a la Policía Bonaerense, el dolor por no estar cerca de los hijos con el logro de la mayor cantidad de días de clase en democracia. Ambiciones y frutos, debilidades y errores, críticas y autocríticas se hilan con humor en esta historia personal que es, también, la historia del país.