En esta obra se analiza una de las temáticas que signan el campo del currículum: su articulación con los planes de estudios institucionales. Es una labor que se encara tomando como referencia varios elementos del debate curricular actual, en particular el papel de la perspectiva tecnicista global, que postula la formación unidimensional del ser humano, reivindicando las tareas productivas por sobre otras visiones, como es el caso de las propuestas de flexibilización y formación en competencias. En estas páginas, el autor retoma elementos que potencian el debate curricular desde la perspectiva del currículum como práctica social y los enfoques de este como expresión de políticas culturales, y fundamentalmente continúa con una línea de investigación abierta en la década de 1980, para construir articulaciones entre la didáctica y el currículum, articulaciones en las cuales el pensamiento didáctico enriquece la perspectiva curricular.