¿Qué articulaciones existen entre la identificación y la pulsión, el significante y la letra, el síntoma y la angustia, y cómo se ordenan en la trasferencia? A ese esfuerzo de clarificación está dedicado el presente ensayo. Toma como punto de partida la palabra analizante y el saber inconciente que esta encierra. Examina poco a poco sus efectos, o sea, la identificación trasferencial y el objeto pulsional que ella pone en juego y que demarcan el territorio en el que el síntoma se recluye. Ellos determinan el progreso de la cura, así como los límites con que tropieza. Esta exposición intenta describir también la temporalidad misma del análisis, desde su inicio hasta sus finales. Abarcando un circuito sumamente complejo, este ensayo no pretende resolver todas las cuestiones sino plantearlas mostrando sus conexiones.