La noche discurre entre discotecas, conciertos y clubes. Son millones las personas que disfrutan bailando salsa, swing o zumba. Hasta los menos bailones son capaces de lanzarse a la pista si suena la canción acertada. Sabemos desde hace mucho tiempo que moverse es sinónimo de alegría, pero ¿por qué? ¿Cómo es posible que bailar desempeñe un papel tan significativo para los seres humanos y para su cerebro? ¿Es cierto eso que dicen de que bailar también hace que las personas sean más sanas y más inteligentes? Estas y otras cuestiones son las que se plantea aclarar un dúo científico muy especial, con mucha pasión y experiencia: un neurocientífico que no sabía bailar y que por ese motivo no se pudo convertir en un ávido bailarín de swing y una bailarina de ballet que se vio obligada a abandonar su pasión y que, actualmente, también se dedica a la neurociencia.
La Dra. Julia F. Christensen y el Dr. Dong-Seon Chang nos revelan que el baile es el mejor entrenamiento para la mente y el cuerpo: ejercita los músculos, entrena el equilibrio y la coordinación, reduce el estrés, y es mejor protector contra la demencia que cualquier crucigrama. Asimismo, el baile alivia los síntomas de la ansiedad y la depresión, aumenta la autoestima y entrena las capacidades empáticas. Igualmente, es un gran compañero en los asuntos del corazón, no sólo porque protege contras las enfermedades cardíacas, sino también porque bailar puede salvar nuestra vida amorosa: a veces el camino al corazón de alguien pasa por el baile.
Los autores proporcionan en este libro una base teórica amena y entretenida para muchos hechos científicos fascinantes sobre por qué los seres humanos bailan, qué explica que la danza sea un medio de expresión, y por qué razón la danza es un cohesionador social. Por otra parte, los autores nos revelan por qué la danza es un símbolo de belleza y seducción, al mismo tiempo que tiene el poder de curar la mente y el cuerpo.
Editorial: OBELISCO
ISBN: 9788491115250
Disponible
Cantidad
Consultar otras cantidadesLa noche discurre entre discotecas, conciertos y clubes. Son millones las personas que disfrutan bailando salsa, swing o zumba. Hasta los menos bailones son capaces de lanzarse a la pista si suena la canción acertada. Sabemos desde hace mucho tiempo que moverse es sinónimo de alegría, pero ¿por qué? ¿Cómo es posible que bailar desempeñe un papel tan significativo para los seres humanos y para su cerebro? ¿Es cierto eso que dicen de que bailar también hace que las personas sean más sanas y más inteligentes? Estas y otras cuestiones son las que se plantea aclarar un dúo científico muy especial, con mucha pasión y experiencia: un neurocientífico que no sabía bailar y que por ese motivo no se pudo convertir en un ávido bailarín de swing y una bailarina de ballet que se vio obligada a abandonar su pasión y que, actualmente, también se dedica a la neurociencia.
La Dra. Julia F. Christensen y el Dr. Dong-Seon Chang nos revelan que el baile es el mejor entrenamiento para la mente y el cuerpo: ejercita los músculos, entrena el equilibrio y la coordinación, reduce el estrés, y es mejor protector contra la demencia que cualquier crucigrama. Asimismo, el baile alivia los síntomas de la ansiedad y la depresión, aumenta la autoestima y entrena las capacidades empáticas. Igualmente, es un gran compañero en los asuntos del corazón, no sólo porque protege contras las enfermedades cardíacas, sino también porque bailar puede salvar nuestra vida amorosa: a veces el camino al corazón de alguien pasa por el baile.
Los autores proporcionan en este libro una base teórica amena y entretenida para muchos hechos científicos fascinantes sobre por qué los seres humanos bailan, qué explica que la danza sea un medio de expresión, y por qué razón la danza es un cohesionador social. Por otra parte, los autores nos revelan por qué la danza es un símbolo de belleza y seducción, al mismo tiempo que tiene el poder de curar la mente y el cuerpo.
Editorial: OBELISCO
ISBN: 9788491115250