Nadie cree a Phileas Fogg cuando asegura que dará la vuelta al mundo... ¡en solo ochenta días! Parece una misión imposible, sobre todo con la policía pisándole los talones y con todo tipo de obstáculos en el camino.

Desde trenes averiados hasta peligrosas travesías acuáticas, ¡e incluso estampidas de bisontes!